lunes, 23 de febrero de 2015

HAZ TU PROPIO FLUIDO MAGNÉTICO: FERROFLUIDOS

El magnetismo es un fenómeno muy curioso que desde su descubrimiento en la Grecia clásica ha fascinado al ser humano. Pero desde el siglo pasado el estudio del Magnetismo ha sufrido un grandísimo avance y como muestra tenemos los fluidos magnéticos o ferrofluidos.



Los ferrofluidos son líquidos que se polarizan en presencia de campos magnéticos produciendo curiosos efectos y a los que poco a poco se les va encontrando un sin fin de aplicaciones.



Están compuestos por sustancias ferromagnéticas suspendidas en un fluido portador, normalmente un disolvente orgánico o agua. El material ferromagnético está formado por pequeñísimas partículas, nanopartículas (milmillonésima de metro) que están recubiertas de una sustancia especial que impide su aglomeración a causa de las fuerzas magnéticas y que asegura la máxima homogeneidad posible del ferrofluido.

El ferromagnetismo es una propiedad de ciertos metales Hierro, Cobalto y Niquel, y de algunas de sus aleaciones. Estos materiales son atraídos por los imanes y pueden incluso transformarse ellos mismos en imanes.

Se podría pensar que la forma más sencilla de formar un ferrofluido es calentar un metal ferromagnético hasta fundirlo. Sin embargo esto no es válido ya que al calentar estos materiales, antes incluso de fundirse, pierden sus propiedades magnéticas. La manera correcta de conseguir estos fluidos es por tanto suspender minúsculas partículas de material ferromagnético en un líquido portador.

Desde 1940 se ha intentado crear un líquido de propiedades magnéticas, pero no fue hasta la década de 1960 que Stephen Papell, investigador de la NASAdesarrolló un método fácil y efectivo de prepararlo. El fluido así creado contenía partículas de Magnetiza de 100 Angstroms de diámetro suspendidas en keroseno y con ácido oleico como agente dispersante.

Aquí os dejo un vídeo de cómo crear vuestro propio ferrofluido: